Maite escribió esta reseña yo le añadí algunos pequeños detalles y la hemos enviado a la página web del Obispado de Orense donde la han publicado.
El primer día, al llegar, el alma se cae a los pies por el caos que se abre ante nuestros ojos, pero cuando se empieza a visitar las casas de Madre Teresa todo va tomando otro color, pues son verdaderos oasis frente a la miseria y suciedad. El primer lugar a visitar es la Casa Madre, donde vive la Comunidad de las Misioneras de la Caridad, orden fundada por Madre Teresa en 1948, tras recibir la dispensa del Papa para dejar su Orden de las Hermanas de Nuestra Señora de Loreto y dedicarse por entero a atender a los mas podres de entre los pobres.
Todo es muy impactante pero sin duda lo más atrayente es rezar ante la tumba de Madre Teresa que esta nada mas entrar en la capilla de la planta baja, abierta a todo el mundo que quiera visitarla y rezar ante ella. Hemos visitado los lugares por los que paso Madre Teresa, como la escuela de Santa María donde enseñaba como hermana de Ntra. Sra. de Loreto, Darjeleen, a 650 km. donde recibió la llamada de Dios para servir exclusivamente a los pobres o la primera escuela y dispensario que fundó en el barrio de Motyheel.
Nuestro viaje ha coincidido con la Semana Santa y la hemos vivido de forma muy especial en Calcuta. Los oficios en la Casa Madre, con toda la congregación y voluntarios ha sido impactante por la devoción con que todo el mundo lo vive. Las celebraciones son normalmente en inglés, pero en ocasiones se han realizado conjuntamente, además de en Ingles, en Italiano y en Español, intercalando lecturas y cánticos en los distintos idiomas.
Nuestro viaje ha coincidido con la Semana Santa y la hemos vivido de forma muy especial en Calcuta. Los oficios en la Casa Madre, con toda la congregación y voluntarios ha sido impactante por la devoción con que todo el mundo lo vive. Las celebraciones son normalmente en inglés, pero en ocasiones se han realizado conjuntamente, además de en Ingles, en Italiano y en Español, intercalando lecturas y cánticos en los distintos idiomas.
Hemos recorrido los centros donde las Misioneras de la Caridad prestan ayuda a los mas pobres, Shisu Bhavan (hogar de niños), Dan (hogar para acoger a enfermos mentales), Titagart (hogar para leprosos), Prem Dam, (hogar para hombres y mujeres aquejados de enfermedades varias). En Prem Dam hemos colaborado como voluntarios en diversas labores, como lavado de ropa, reparto de comidas y atención, aseo y entretenimiento de los enfermos. La tarea de los voluntarios comienza a las 6 de la mañana en la Casa Madre con la asistencia voluntaria a la Eucaristía, seguida de un desayuno a base de te con leche, plátanos y pan. A las 8 partimos cada grupo al centro que le han asignado, para hacer una jornada de 8 a 12 h, con descanso a media mañana para compartir experiencias, si duda inolvidables.
El tiempo se ha pasado volando y todos hemos vuelto con la sensación de que nos ha sabido a poco y queremos repetir la experiencia lo antes posible. Hemos aprendido que allí en Calcuta, la vida tiene otro sentido, otros valores, que aquí no sabemos apreciar.