lunes, 25 de marzo de 2013

Vadeando el Hugli

Por José María

Al salir de Shishu Bhavan todo es euforia, los niños han disfrutado con nosotros, nosotros hemos disfrutado como niños, hemos cantado alguna otra canción más seria para las hermanas, ya en la puerta del hogar.

Nosotros con nuestra euforia, pero tenemos que ir a la estación del tren para arreglar el tema de los billetes a Shantiniketan, que Isa e Irene no tienen y Totan va a ver como los conseguimos.


Para cruzar el gran puente Howrah Bridge sobre el Hugli hay un buen atasco por lo que decidimos cruzarlo en un transbordador. 

Ya es de noche y hay poca luz, pero allí estamos nosotros guitarra en mano organizando una pequeña fiesta para deleite nuestro y de los pasajeros. 


La estación Howrah está abarrotada de gente, como es habitual.


Hay que pagar por entrar y la cola en las taquillas es larga, pero para nuestra sorpresa hay un cartel que indica que con el carnet de voluntario de las Misioneras de la Caridad se puede pasar gratis. Allí nos dirigimos con el carnet en la mano, pero da igual, de todas formas no hay nadie en la puerta de acceso, como todo en Calcuta un caos bien organizado.


De vuelta fuimos a cenar a otro buen restaurante, de esos que por unos 5 € cada uno, cenamos como verdaderos marahas.


4 comentarios:

  1. Los de la Parroquia de Santo Domingo, llevando alegría allí donde van.

    ResponderEliminar
  2. Gracias Jose María por traer la música a Calcuta. Llenasteis de alegría las calles, los barcos, los taxis, los centros de Madre Teresa, los aeropuertos, los parques, los restaurantes, las tiendas, los tuc tuc...

    ResponderEliminar
  3. Muchas gracias Irene, tu contribuiste a llevar asa alegría.

    ResponderEliminar